Hoy voy a entrevistar a Blanca Padilla, modelo que desfiló dos veces para Victoria´s Secret y que además hace dos años colaboró con nosotros en la campaña "Ponle cara rara a la Laminopatía". Es entrañable, muy cariñosa, tremendamente humana y muy sensibilizada con estas causas. Os va a encantar.
¿De
pequeña querías ser modelo?
No, nunca me lo había planteado
realmente en serio ni fue mi foco de atención cuando era pequeña. Me gustaba
pintar, escribir, las personas. Era una mandona y ¡me encantaba pasar horas
escribiendo! En muchas ocasiones escuchaba comentarios a mi alrededor sobre lo
mucho que debería planteármelo, sobretodo a partir de la adolescencia, pero
nunca imaginé ni tan siquiera hacerlo full time o que fuese mi trabajo, y por supuesto no imaginé que llegaría a
lo que es ahora mi carrera. Ha sido una aventura enriquecedora y
definitivamente interesante.
Has estudiado Publicidad y
Relaciones Públicas, ¿por qué elegiste esta carrera?
Me encanta que preguntes este
tipo de cosas pues me hacen rebobinar hasta aquel entonces, y mi vida ha
cambiado tanto que no lo hago tan a menudo. Casi me cuesta acordarme. Cuando
llegó el momento de elegir, no tenía muy claro lo que hacer. Pero sabía que
tenía que ser algo donde creatividad y letras estuviesen muy involucrados. Casi
me decanto por periodismo ya que disfruto mucho escribiendo, pero la oferta de
periodistas en el mercado era altísima. Entonces empecé a interesarme por
Publicidad y RRPP, a mirarlo más de cerca. Me fascina todo lo que tenga que ver
con el comportamiento humano y sus razones, y me di cuenta de lo fascinante que
era el ser capaces de desarrollar estrategias y planes creativos e innovadores
que literalmente consigan hacer cambiar a las personas de parecer de una manera
drástica, que cambien su manera de pensar, e impulsarlos así a una acción
determinada, de compra o de cualquier otra naturaleza. Me parece interesante
nuestra debilidad en ese sentido, la capacidad de influencia de la
comunicación, los patrones de comportamiento repetidos que se pueden ver con la
publicidad y las RRPP en las masas, y que este tipo de estrategias sean tan
increíblemente eficientes en la población. Además de eso, siempre me ha
interesado la comunicación en todas sus vertientes. Empecé la carrera
combinándolo con marketing, haciendo un doble grado, pero tras mi primer año la moda comenzó a
tener un peso importante en mi vida, y tuve que cambiar a la modalidad online y
a únicamente Publicidad y Relaciones Públicas. Ahora estoy a punto de terminar
y, aunque he ido avanzando a un ritmo bastante ralentizado, me alegro de no
haberlo dejado.
Creo que en el Metro tuviste
un encuentro que te cambió la vida, ¿cómo fue?
Si, fue un momento curioso. Y el
principio de todo. Yo estaba en el metro con el que era mi novio entonces,
íbamos hacia su casa después de una noche de fiesta. En el mismo vagón había un
hombre que no dejaba de mirarme. Yo notaba su mirada clavándose e intentaba
pasarlo por alto. Estaba muy cansada y el vagón estaba lleno, y, cómo no, los
únicos sitios que se vaciaron en aquel momento fueron los dos de al lado de
esta persona, que continuaba mirando, como queriendo decir algo. Creo que dudé
por un segundo, pero me senté. El hombre misterioso me preguntó si era modelo.
Le dije que no, y él me dijo que si querría serlo. Ya fuera del vagón,
continuamos hablando un momento y me aseguró que tenía un futuro prometedor. Me
sacó un par de fotos en medio del metro de Madrid. Yo era muy desconfiada y
realmente no sabía lo que pensar. Después de aquel día vinieron meses de
ignorar sus llamadas, pues no tenía nada claro. Pero también sabía que nunca se
había dado la ocasión de esta manera, y quizá la vida me lo estaba dando en
bandeja y diciéndome “cógelo”. Lo hablé con mis padres en casa, siempre
agradeceré la libertad que me dieron en mi decisión. Pero me costó meses
decantarme: comprometerme a este mundo nuevo y absolutamente desconocido podría
suponer grandes cambios en mi vida. Experimenté una especie de vértigo nuevo.
Esa persona que me aproximó en el metro ha sido mi representante durante 6
años. Decidí darle una oportunidad a todo ello, y aquí seguimos.
¿Cuál fue el primer contrato
que firmaste en el mundo de la moda?
Seguramente para la pasarela
Cibeles. La primera temporada que firmamos, en la que Nacho venía a recogerme
en moto a la Universidad y volábamos a los shows, porque yo seguía yendo a
clase en aquel momento.
Con sólo 19 años fuiste nombrada
“Modelo femenina del año” en la 59ª edición de la Semana de la Moda de Madrid
Mercedes Benz por tu elegancia. Eras muy joven, ¿sientes que ahí se acabó tu
juventud porque entraste de lleno en el mundo profesional de la Moda?
De algún modo si he sentido que
dejé de serlo, no inmediatamente pero si gradualmente, en gran parte porque lo
que estaba ocurriendo en mi vida no se correspondía en absoluto con lo que las
personas de mi entorno y mi misma edad estaban atravesando. Las vivencias de
aquellos años y los cambios que se instalaron tan rápidamente en mi vida
contribuyeron a que siguiese siendo joven, pero de un modo muy diferente a lo
que estaba acostumbrada o veía que otros tenían. Los procesos fueron distintos.
Con los años he visto que todo esto me ha otorgado un crecimiento que de otro
modo quizá nunca hubiese llegado. No me arrepiento de nada, veo cada
experiencia como pequeños peldaños que me han ayudado a llegar a donde estoy
internamente.
¿Qué es para ti la
elegancia?
Una especie de fuerza magnética
natural, espontánea y orgánica que comienza en el interior. Una fuerza interna
especial que hace que tu ser y tu manera de obrar sea distintiva y motivo de
inspiración para tu alrededor.
Has desfilado en pasarelas tan importantes como París, Nueva York, Milán, Londres , de todas ellas ¿Cuál te ha impactado más?
Seguramente París sea el mercado más duro en lo que a pasarela se refiere. Tengo muchas memorias de ello, tanto buenas como malas. Sin embargo, es una ciudad que al mismo tiempo me ha dado mucho y de la que tengo algunos de los mejores recuerdos de mis 6 años de carrera, con la familia Givenchy entre otros. Cada ciudad ofrece una sensación distinta, y resulta curioso experimentar las diferencias entre ellas en lo que a semanas de la moda se refiere.
Has desfilado en pasarelas tan importantes como París, Nueva York, Milán, Londres , de todas ellas ¿Cuál te ha impactado más?
Seguramente París sea el mercado más duro en lo que a pasarela se refiere. Tengo muchas memorias de ello, tanto buenas como malas. Sin embargo, es una ciudad que al mismo tiempo me ha dado mucho y de la que tengo algunos de los mejores recuerdos de mis 6 años de carrera, con la familia Givenchy entre otros. Cada ciudad ofrece una sensación distinta, y resulta curioso experimentar las diferencias entre ellas en lo que a semanas de la moda se refiere.
En 2014 conseguiste desfilar
para la firma de lencería Victoria’s Secret. Tres años después volviste a
hacerlo en Shanghái, siendo además la primera española en desfilar dos veces
para la firma y en colgarte las exclusivas alas, ¿qué supuso para ti?
Una experiencia genial que nunca
olvidaré. Me enseñó muchas cosas sobre mi misma y la industria. Cosas que con
el tiempo, puestas en perspectiva, han constituido grandes aprendizajes que me
llevo conmigo para siempre. El show en sí mismo fue muy divertido, la
preparación física y mental antes y después del proceso de castings fue dura
pero también enriquecedora. Entre medias de los dos shows hubo un “no” que me
demostró que el “sí” puede ocurrir en cualquier momento en la vida cuando
existe determinación, trabajo y paciencia, y que es importante también tomarse
las cosas un poco menos en serio y aprender a reírse de uno mismo y de la
situación. Creo que esto último es algo que me ha costado implementar en mi
vida personal y profesional, y que a día de hoy continúo recordándome
constantemente.
Cuéntame qué estás haciendo a
día de hoy
Estoy muy focalizada en mi
misma, dejando que el terreno profesional fluya como nunca antes he permitido o
sabido permitir. En lugar de poner todo el foco en esa realidad externa y en lo
que ocurre o lo que no, creo que de algún modo lo he girado hacia mi misma.
Estoy tratando de escucharme y honrarme más que nunca, y, como digo, tomándome
un poco menos en serio la vida en lo que a trabajo se refiere. Esto no
significa que lo haya descuidado, ni mucho menos. Simplemente lo he desplazado
a la primera fila, ha dejado de ser el centro de mi mundo para colocarme a mi
misma en esa posición, como debió de ser desde el principio. Esta industria
puede traerte cosas maravillosas pero también es fácil que absorba todo tu
mundo, y para mi es importante recordar que antes que ninguna otra cosa, soy
Blanca. Mi bienestar y mi vida fuera de la moda ha de ser una prioridad, sin
dejar de trabajar duro en mi profesión. Creo que ha sido un equilibrio complejo
de alcanzar, pero también fundamental. Y creo que en eso estoy ahora mismo, en
dejar fluir el trabajo más que nunca.
¿Cómo te ves en un
futuro?
Seguramente todavía vinculada a
la moda en muchos sentidos. Es una realidad que esta industria me ha dado
mucho. Espero que habiendo empezado algo de mi propia cosecha también. Y feliz
y tranquila. La vida dirá.
El próximo sábado 29 de
febrero se celebra el Día mundial de las enfermedades raras. A ti ¿en qué te
sirvió ayudarnos en la campaña “Ponle cara rara a la Laminopatía”?
Me sirvió para conocerte,
Andrés, y eso ¡lo fue todo! Fue especial y bonito. Pero también para conocer un
poco más de la realidad de todos aquellos que sufren de estas enfermedades.
Creo que es importante que el mensaje llegue a muchas más personas, que
entendamos que estas enfermedades nos afectan a todos de algún modo.
¿Crees que vivimos en un mundo
suficientemente solidario?
No lo creo. Pienso que vivimos
en un mundo desafortunadamente egoísta en muchos aspectos. Creo que nos
enfocamos en nosotros mismos pero no del modo correcto, no desde la compasión y
el amor. Somos egoístas en un sentido erróneo. Es cierto que focalizarnos en
nosotros es fundamental para el crecimiento interior, para ampliar nuestra
visión y así poder iluminar al mundo desde nuevas perspectivas, más útiles para
todos. Pero también es cierto que tenemos miedo de mirar hacia dentro, de
sentir, de expresarnos desde nuestra verdad absoluta, y, por tanto, nuestra
aproximación a ese “egoísmo” y a ese supuesto “amor propio” es errónea. Creo
que todos necesitamos juzgar menos, amar más. Tener más compasión hacia el
mundo. Oír menos. Escuchar mejor.
He visto en tu cuenta de
Instagram que estás muy comprometida con el planeta, con el medio ambiente,
¿qué opinas de la ayuda de los gobiernos para cuidar el planeta? Y barriendo
hacia lo que nos ocupa, ¿qué opinas de la ayuda de los gobiernos a las
enfermedades raras?
Creo que los gobiernos podrían
apoyar más en muchos sentidos...
¿Cómo crees que nos pueden
ayudar mis lectores para que se conozcan más las enfermedades raras?
El boca a boca es más poderoso
de lo que creemos. Y las redes sociales tienen un poder brutal hoy en día.
Postear, tener conversaciones sobre ello con familias y amigos... todo suma.
Difundir y mantener vivo el tema es importante.
¿Quieres añadir algo que no te
haya preguntado?
¡¡Que te doy un abrazo enorme!!
Y que he disfrutado un montón contestando tus preguntas. Gracias
Me ha gustado mucho Andrés, como todas tus entrevistas. Cada día lo haces mejor. Blanca Padilla, fantástica. Felicidades a los dos. Besos
ResponderEliminarEstupenda entrevista. Estoy de acuerdo, cada entrada en el blog es mejor! Blanca, como decía mi abuela, guapa por fuera y por dentro, que es lo importante! Una pareja de guapos!
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